El cannabidiol (CBD) es el principal cannabinoide del cáñamo industrial (Cannabis sativa L.). En los últimos años ha aumentado el interés por el potencial terapéutico del CBD. Este cannabinoide, al no ser psicoactivo, no puede dar la sensación de estar bajo los efectos de la droga. Químicamente, el CBD entra en la categoría de los compuestos terpeno-fenólicos, que se producen abundantemente en estructuras parecidas a pelos, llamadas tricomas glandulares, que se encuentran en la superficie de las flores y las hojas de las plantas de cannabis.
Hay dos fuentes principales de CBD: la planta de marihuana y la planta de cáñamo. Existen numerosas variedades de marihuana con distintos niveles de tetrahidrocannabinol (THC). Por otro lado, la planta de cáñamo contiene menos del 0,2% de THC. Dados los bajos niveles de THC en la planta de cáñamo, es la mejor planta para la extracción de CBD puro.
Historia del CBD
Los primeros usos medicinales conocidos del cannabis fueron en China y otras partes de Asia durante la antigüedad. Su introducción en la medicina occidental se produjo mucho más tarde, en la década de 1830. Aunque el CBD, el fitocannabinoide más reconocido, se aisló de la planta por primera vez en 1940, su identificación estructural completa no se comunicó hasta tres décadas después. Con el descubrimiento del sistema endocannabinoide en el cuerpo humano en la década de 1980, los efectos fisiológicos de la planta de cannabis y los fitocannabinoides se están estudiando ahora a un nivel aún más profundo.
Investigación sobre el CBD
Aunque se descubrió pronto, el CBD no se ha convertido en un área importante de investigación hasta los últimos años. El estudio de Summer Burstein informó de que sus acciones biológicas son objeto de muchos informes interesantes que sugieren posibles aplicaciones terapéuticas. Se incluyen sus acciones antiinflamatorias en una variedad de modelos preclínicos. Algunos ejemplos son la colitis experimental, la artritis inducida por colágeno, la neuroinflamación inducida por β-amiloide, la quimiotaxis de neutrófilos, etc. Estos y otros deben ser llevados a cabo en ensayos con humanos con vistas a aplicaciones clínicas en las que la ausencia de efectos psicotrópicos y otros eventos adversos del CBD ofrecen una gran ventaja sobre otros cannabinoides. Otra área que necesita nuevas investigaciones es el descubrimiento de análogos sintéticos con mayor potencia que el CBD que aún conserven una proporción terapéutica favorable.
¿Es legal el CBD en la UE?
Una respuesta corta y demasiado simplificada a esta pregunta es “sí”. Sin embargo, el estatus legal de los productos de CBD depende de muchos factores, como la forma del producto final, la fuente del CBD y por último, pero no menos importante, de las regulaciones específicas de cada país. Si deseas obtener información más específica, dirígete a este blog.
Conclusión
En los últimos años ha crecido el interés por el CBD. Por ello, se están llevando a cabo más investigaciones y se están descubriendo y estudiando más propiedades beneficiosas. El futuro es brillante, y el CBD puede convertirse en uno de los ingredientes clave para una vida larga y saludable.
En Pharmahemp estamos recompensando a nuestros fieles clientes con ofertas especiales y lanzamientos de nuevos productos. Puede seguirnos en nuestras redes sociales y en nuestra página web para conocer todas las actualizaciones. Para cualquier pregunta sobre el proceso de fabricación, el control de calidad y los productos finales, no dude en ponerse en contacto con nosotros en [email protected].